viernes, 19 de marzo de 2010

HA MUERTO EL GRAN ESCRITOR MIGUEL DELIBES

MIGUEL DELIBES
Nace Miguel Delibes en Valladolid el 17 de octubre de 1920. Miguel Delibes es el tercero de los ocho hijos del matrimonio Adolfo Delibes, profesor y director de la Escuela de Comercio de Valladolid, y de María Setién, burgalesa.
El niño Miguel estudia en el colegio de La Salle y, en 1938, con 17 años, y antes de que le movilicen como soldado en la guerra civil que asola España desde 1936, decide enrolarse como voluntario en la Marina. “Casi con seguridad iban a destinarme a Infantería y me horrorizaba la idea del cuerpo a cuerpo, la guerra en el mar era más despersonalizada, el blanco era un barco, un avión, nunca un hombre. Yo lo veía como un mal menor”.
Novelista casi por azar
Regresa a Valladolid recién terminada la guerra y estudia Comercio y Derecho. Sin embargo, ninguna de estas carreras le complace. Y sólo el azar quiere -él mismo lo ha reconocido así- que desemboque en el mundo del periodismo y de la literatura. Un azar que comienza cuando, al estudiar el Manual de Derecho Mercantil de Joaquín Garrigues, descubre la belleza del lenguaje y la eficacia de la metáfora y el adjetivo oportunamente empleado. Como también le gusta el dibujo -su padre le ha matriculado en la Escuela de Artes y Oficios-, Miguel Delibes ingresa como caricaturista, en 1941, en “El Norte de Castilla”, el periódico de su ciudad, y pasa luego a ser redactor.
Ya es por entonces novio de Ángeles de Castro y ésta -que luego será su esposa- le anima a leer y a satisfacer el espontáneo deseo de ponerse a escribir. De esta manera, casi por puro azar y con una formación eminentemente autodidacta en lo que a lo literario se refiere, escribe su primera novela, “La sombra del ciprés es alargada”, que consigue el prestigioso premio Nadal, en la noche de Reyes de 1948.
Es el espaldarazo. Dos años antes se había casado con Ángeles de Castro y había conseguido la cátedra de Derecho Mercantil en la Escuela de Comercio de su ciudad.
A partir de ahora compaginará la enseñanza, el periodismo y la literatura.
Del periodismo a la novela
Miguel Delibes es nombrado subdirector de “El Norte de Castilla” en 1952 y director en 1958. Emprende una serie de campañas en favor del medio rural castellano y ello le lleva a enfrentarse con el régimen y la censura reinantes, viéndose obligado a dimitir de su cargo en 1963. Pero no ceja por eso en su denuncia de la postración de Castilla y, cuando no puede hacerlo desde el periódico, lo hace desde la narrativa. Nace así su novela “Las ratas” (1962), verdadera epopeya novelada de la tragedia del campo castellano.
Pero ya antes había publicado varios títulos más, en especial “El camino” (1950), su tercera novela y arranque y confirmación de lo que habrá de ser su auténtico estilo narrativo.
Junto a títulos señeros como “La hoja roja” (1959), “Cinco horas con Mario” (1966), “Parábola del náufrago” (1968) -su novela más experimental-, o “Las guerras de nuestros antepasados” (1975), Delibes publica también sus primeros libros de caza y crónicas de viajes, principalmente “USA y yo” (1966), consecuencia de su estancia de seis meses en Estados Unidos, como Profesor visitante de la universidad de Maryland.
Académico de la lengua
En 1973, con más de veinte libros publicados y varios premios en su haber, Miguel Delibes es elegido miembro de la Real Academia de la Lengua, ocupando el sillón e minúscula. La toma de posesión tiene lugar el 25 de mayo de 1975, y su discurso versa sobre “El sentido del progreso desde mi obra”.
Sólo unos meses antes, en noviembre de 1974, había muerto su esposa Ángeles, a la que el novelista había calificado como su “equilibrio” y la “mejor mitad de mí mismo”. En una novela que Delibes publicará diecisiete años más tarde, “Señora de rojo sobre fondo gris” (1991), evocará la singular figura de esta mujer.
La muerte de su esposa deja sumido al escritor en una profunda depresión, de la que comienza a salir tres años más tarde con la publicación de su novela “El disputado voto del señor Cayo” (1978). Siguen nuevas novelas, nuevos libros de caza, alguna nueva crónica viajera y varios de sus relatos -doce en total- son llevados al cine o al teatro. “Los santos inocentes” en la pantalla y “Cinco horas con Mario” en los escenarios son los logros más notables en sendos géneros.

Premio Cervantes
Llegan también para Miguel Delibes los reconocimientos y los premios: el Príncipe de Asturias, en 1982; el premio de las Letras de Castilla y León, en 1984; el de las Letras Españolas, en 1991; y dos años más tarde, en 1993, el premio Cervantes, el más prestigioso galardón para escritores de habla hispana. Su discurso de aceptación del premio ha sido considerado como uno de los más bellos y profundos de cuantos se hayan pronunciado en el Paraninfo de la Universidad de Alcalá de Henares. Y aun cuando en él parece dar a entender Miguel Delibes que da por clausurada su creación literaria, cinco años más tarde, en 1998, publica la que puede considerarse su novela más ambiciosa e incluso su obra cumbre: “El hereje”, un alegato en favor de la libertad de conciencia. La novela se desarrolla en el Valladolid del siglo XVI, y “a Valladolid, mi ciudad” dedica Delibes el libro. Ciudad donde nació y donde ha vivido siempre porque, como él mismo ha repetido, “soy como un árbol, que crece donde lo plantan”

Muerte
Durante los primeros días de marzo de 2010 su estado de salud empeoró, provocando que el día 11 de marzo su situación fuera ya crítica, encontrándose el escritor consciente pero muy sedado, por lo que la familia esperaba el fallecimiento del autor en cuestión de horas. Falleció finalmente en su domicilio vallisoletano a primera hora de la mañana del 12 de marzo de 2010, a los 89 años de edad, como consecuencia del cáncer de colon que se le diagnosticó en 1998 y del que no pudo recuperarse.

El féretro de Miguel Delibes en la capilla ardiente instalada en el salón de recepciones de la Casa Consistorial de Valladolid.


1) Completa la sinopsis del libro Los Santos Inocentes usando las palabras del recuadro, algunas pueden aparecer más de una vez:
.
Extremadura, años sesenta. El …………………………. regentado por don Pedro el Périto
vuelve a recobrar vida. Se anuncia la llegada de la señora Marquesa. Ante el
acontecimiento, Paco, el Bajo vuelve con su familia, Régula y sus tres hijos, al
cortijo y se instalan en la vieja casa. Muy pronto se les une el hermano de Régula,
Azarías.
El "señorito Iván", un gran …………………………. a la ………………….., cuenta siempre con
Paco para seguir manteniendo su fama en todas las batidas que organiza. Las
fiestas se suceden en la Casa Grande, la Marquesa continúa siendo muy espléndida
con sus ……………………, se celebra por todo lo alto la primera comunión de su nieto,
don Pedro tiene problemas con la coquetería de su mujer, doña Purita, y el señorito
Iván sale una y otra vez de ……………………….. Sus amigos únicamente ven a la
familia de Paco como una imagen típica de la zona.
Un día Paco se rompe una pierna al caerse de un ……………………., esto contraria a
Iván que no le permite recuperarse y le arrastra a nuevas cacerías hasta que Paco
no se puede mover. Los siguientes días de ……………………. se vuelven contra Iván,
que no consigue ninguna ………………………….. Prueba a Quirce, el hijo de paco, y no le
sirve; no tiene la destreza de aquél. Se lleva a Azarías y aunque lo hace mejor, no
tan bien como Paco.
Un día, en un arrebato, Iván mata a la "Milana bonita", el …………………………… que
había amaestrado Azarías. La tristeza se vuelca sobre el pobre viejo quien, al día
siguiente, cuelga a Iván de un …………………….. Los hechos obligan a Paco y a su
familia a abandonar el cortijo y Azarías es internado en un …………………………….

Cortijo caza criados árbol
Pájaro manicomio aficionado presa

No hay comentarios:

Publicar un comentario